23 diciembre 2017

Al margen de las falacias y ritos impuestos por la curia católica, ¡Oh Navidad, dulce Navidad!

¿Sabía usted que Judás el traidor escribió una breve biografía de Jesús de Nazaret? ¿Sabía usted que han sido hallados varios escritos atribuidos a la mujer conocida como María Magdalena, a la que acreditados historiadores consideran la esposa de Jesús?, ¿Sabía usted que han sido halladas las llamadas actas de Poncio Pilato y unos textos conocidos como los hechos de Pedro, más un Apocalipsis del evangelista identificado como Pablo?
Hay mil y una preguntas sobre las palabras y las andanzas del Nazareno y casi todas carecen de respuesta, y tras siglos de "mentiras documentadas", medias verdades y pueriles invenciones hay una pregunta global bien simple: ¿Por qué la Iglesia Católica ha vetado u ocultado (siempre que ha podido) esos y otros escritos y documentos?; aparte de los que ha destruido, que no son pocos.
La mayoría de los textos referidos a Jesús el Nazareno o que lo mencionan fueron escritos entre la segunda mitad del siglo I y finales del IV; es más, la mayoría de esos textos desmienten gran parte de las afirmaciones irrefutables que divulga la Iglesia Católica; sin olvidar que sucesivos obispos de Roma (papas) y concilios han modificado o anulado hechos y palabras, o peor: se los han inventado, amén de las interpretaciones que ha pergeñado la curia en función de sus intereses o por motivos que casi nunca han sido expuestos claramente.
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No es un libro anticristiano

Jesús según los apócrifos es un libro elaborado con criterios históricos y con respeto, sin denostar las tesis o principios morales o éticos de los cristianos --por cierto, ¡casi todos heredados de culturas y religiones precedentes!

En este trabajo de Beatriz Ontaneda y Rose M. Paz Wells [editado por Nowtilus en 2008] queda constancia, entre otras cosas, de que muy probablemente José ya era viudo cuando se emparejó con María, además de que el supuesto padre del Nazareno era un hombre de la clase alta de fe judaica.
¿Sabía usted que según las autoras de esta investigación, el  tal José dudaba de ser el padre biológico de Jesús?, cosa  que numerosos padres de la época compartían en culturas donde la religión había impuesto una moral 
tan rigurosa como la de la antigua Canaán, todo sea dicho.
¿Sabía usted que el hijo de José y María residió durante cierto tiempo en el palacio de Herodes el Grande? ¿Sabía usted que hay dudas racionales de que el judío que se rebeló contra la curia y murió crucificado fuera el que más de medio siglo después de su ejecución los evangelistas identificaron como el supuesto hijo del adinerado José?
Jesús según los apócrifos es un libro que conviene leer, pero no porque cuestione valores éticos o morales de la cultura judeo-cristiana --cosa que las autoras evitan premeditadamente-- sino porque arroja luz sobre aspectos que son fundamentales para conocer un poco mejor al personaje llamado Jesús el Nazareno y, en paralelo, porque la investigación de las autoras ayuda a entender la esencia de la Iglesia Católica, que desde el concilio de Nicea (325 d. C.) se ha dedicado a reinterpretar mensajes morales que tenían siglos de antigüedad, creando y recreando cuanto ha necesitado para orquestar la moral impuesta como religión oficial por el emperador Constantino, estableciendo normas de comportamiento obligatorias y ritos reglados que solo tangencialmente están emparentados con los del cristianismo original, que fue una variante heterodoxa del judaísmo, tal como queda reflejado en los escritos vetados por la curia romana.
..E INTERÉS: «Cristo nació cinco años antes de Cristo, si realmente nació», en El país

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